Me lo entregaron a finales de junio del año pasado y hace unos días que lo he terminado. Tiene apenas 130 páginas, pero no he sido capaz de terminarlo antes. A veces por miedo a leer algún fragmento que me hiciera descubrir algo para lo que aún no estuviera preparado. Otras, por la impotencia de ver que Simón podía percibir una belleza tan grande y no saber apreciarla.