La hispanofobia implícita en la propaganda negrolegendaria se aglomera en torno a dos elementos fundamentales: La Inquisición española y el descubrimiento de América. Estos fenómenos históricos son desde muy pronto recubiertos de toda una mitología que superpone oscuridad y demonización sobre hechos y datos. Generalización de la culpa y negación de la complejidad de los hechos son rasgos definitorios del agit-prop antiespañol.
