Las obras de José Jiménez Lozano, como la buena Literatura, nos llevan a plantearnos
las grandes cuestiones que importan al hombre. Con Se llamaba Carolina el autor nos enfrenta a la nostalgia que experimenta el ser humano. En nuestra sociedad, la lectura de la obra de Lozano invita al sosiego, a no hacer tabla rasa de la Historia, a extraer la realidad vital que se esconde detrás de cada situación a la que nos enfrentamos.