A lo largo de 13 capítulos se nos ofrece una atenta justificación de la naturaleza necesariamente testimonial de una eclesiológica sistemática a través de la profundización en el carácter sacramental de toda reflexión sobre la Iglesia.
A lo largo de 13 capítulos se nos ofrece una atenta justificación de la naturaleza necesariamente testimonial de una eclesiológica sistemática a través de la profundización en el carácter sacramental de toda reflexión sobre la Iglesia.