La tesis de Dreher es una gran denuncia: que el totalitarismo silencios actual es peor que el antiguo comunismo soviético, porque no resulta tan evidente. (…) «Creen que pueden cambiar las realidades cambiando las palabras (…) El lenguaje es la forma en que enmarcamos conceptos en nuestra mente. Por eso están obsesionados con el lenguaje de género»