Frente al pensamiento líquido y la frivolidad de los tiempos, la profesora universitaria norteamericana Zena Hitz muestra su fe en el placer intelectual, porque después de todo, un solo placer: el conocimiento.
Frente al pensamiento líquido y la frivolidad de los tiempos, la profesora universitaria norteamericana Zena Hitz muestra su fe en el placer intelectual, porque después de todo, un solo placer: el conocimiento.