Encarcelada y torturada como opositora durante 8 años, desde la prisión escribía sus críticas con su propia sangre, a falta de tinta. También escribía poemas y oraciones y rezaba por sus perseguidores.
Encarcelada y torturada como opositora durante 8 años, desde la prisión escribía sus críticas con su propia sangre, a falta de tinta. También escribía poemas y oraciones y rezaba por sus perseguidores.