El mundo necesita cristianos, no demócratas liberales que casualmente van a la Iglesia.

¿Qué pueden hacer los cristianos para recuperar el crédito social que permita que sus propuestas se escuchen en el espacio público?
–Ante todo, no ceder a la presión por quedar bien. Esto significa no adaptarse a las tendencias actuales. Creo que deberían mostrarse como cristianos de pleno derecho, sin componendas. Y con coraje y determinación, deben defender no sólo la fe, sino toda la enseñanza moral que viene con el Cristianismo, así como su antropología. Esto es algo de lo que Europa se ha alejado y olvidado.